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Se escriben muchas ganzadas en los blogs

Y un día volví. Física y virtualmente: mi cuerpo está aquí y hay blogs.
Un comentario (ver comentario Anónimo de esta nota de Il Corvino), firmado por un tal Nico, me mostró la punta del ovillo. Era lo que estaba necesitando para ordenarme y contar.

Conferencia de prensa en una casa de Luis Guillón. Pocas cámaras, te diría que ninguna. A mi lado, un escritorio que debería estar lleno de papeles, también llamados folios o expedientes, dispuestos para las cámaras. Pero así como dije que no hay cámaras, digo que no hay expedientes. Estoy yo, un teclado y la omnipresente pantalla.

Volví de eso que mi amigo Nico llama "el norte", donde afirma que "los chicos se mueren de hambre". ¿Se acuerdan? Los chicos se morían de hambre en Tucumán. Una nena tucumana lloraba de hambre por cadena nacional, para el programa de Lanata. Y esa nena llorando, que seguramente habrá llorado muchas otras veces antes, de hambre también, fue como la confirmación final de que todo se había ido al carajo (se estuvo yendo durante mucho tiempo, hablemos claramente). La descubrimos a la nena en Buenos Aires, y una vez que ganó la primera plana y el horario central supimos (el país lo supo, porque lo supo Buenos Aires, es así como funciona la cosa - para los que dicen que no hay monopolios) que nos habíamos equivocado tanto... Era la Tucumán del 2001/2002.

Estamos en el año 2010. Viajé a Tucumán. Es el paradigma del norte argentino de Nico (y de muchos otros), del hambre y la pobreza estructural en un país adonde todo sigue igual. Donde, supuestamente, seguimos haciendo llorar a los chicos.

Hay dos pueblos netamente rurales, Atahona y Monteagudo, que pertenecen al departamento de Simoca, al sudeste de la provincia. Pegadito a Santiago. Es ésta, de acuerdo a sus propios habitantes, la zona más pobre de la provincia. Estuve viviendo ahí casi dos semanas. Y sí, vi pobreza, mucha, como ya había visto antes en otros lugares.

La situación es la siguiente: hay una fundación, que tiene un tren, que es un hospital pediátrico. El tren viaja a las provincias del norte pobre con médicos voluntarios. Ahí estuve yo. Ví y viví lo que un médico de ese tren. Y fui a colegios rurales, adonde dormí, y conversé con maestros rurales y con la directora de esa escuela, y con el delegado comunal, y con los vecinos y con los chicos.

Lo reitero, para que quede claro: hay pobreza.

Y acá entramos en uno de las vueltas de este ovillo que es mi relato: para mi (¿nuestra?) mirada urbana pequeño burguesa, hay pobreza. La gente tiene poco, usan las zapatillas hasta que revientan, algunos se mueven a caballo, crían gallinas para comer. Esa noción de pobreza como típico reduccionismo mercantil de clase existe.

Espero que esto que digo encuentre su explicación más adelante.

Hay también, si ampliamos un poco la mirada, un défict grande en lo que respecta a tópicos más caros a la mirada del progresismo nacional y popular (ideología que, vale aclarar, mejor me representa): la educación y el acceso a la salud. Sin ser un profesional sanitario, siendo solo un mero testigo durante 12 días, me arriesgo a hablar de una situación de déficit. Y doy mis razones (aviso acá que el texto es largo y pido disculpas):

1- Pediatras, odontólogos y asistente social en charla informal:

- los chicos tienen la boca a la miseria. No se cepillan los dientes.

- lo que me llama la atención es que de peso y talla están bien. No vi cuadros de desnutrición.

- Las madres manifiestan que cobran la asignación universal. Algunas se tienen que poner al día con el DNI o las vacunas.

- Hay cosas básicas de educación (para la salud) que faltan.

Se entiende que los díalogos no son textuales, no?


2- Pueblo de Monteagudo. Encontré en google que el Censo 2001 dió 2300 personas. Tiene lo que se conoce en la jerga médica como CAPS. Intuyo que quiere decir Centro de Atención Primaria de Salud, o similar. Es relativamente grande, más o menos nuevo (le calculo 3 o 4 años). No entré, pero escuché a los médicos del tren decir que hay una enfermera, va un médico algunos días de la semana, una ginecóloga y he visto una ambulancia en la puerta.

El hospital más cercano está en Simoca, capital del departamento, a unos 10 km de Monteagudo. Pasé por la puerta 2 veces con el colectivo. Parece grande, es nuevo y, si se pudiera hablar de belleza en este tipo de construcciones, diría que es lindo. No conozco su interior, si tiene todo, como es la atención. Mi última experiencia en hospitales es, paradójicamente, también de Tucumán. Fue muy positiva, y se puede leer aquí.

- 3- Unos 400 chicos se atendieron en el tren hospital en los 12 días que estuvo entre los 2 pueblos. De mi simple observación puedo decir que el problema más grave y recurrente es el de caries y dientes podridos. Faltan servicios de odontología al alcance de todos, y falta prevención, lo que me lleva directamente al punto siguiente:

- 4- Visito la escuela de “Los Perez”, pequeña población, un caserío diría, en el medio del monte. Es una escuela digna (por usar un término descriptivo más o menos ambiguo, que no brinda muchas seguridades). Simplifico y le explico a la maestra que visito su escuela como colaborador del tren hospital. Me dice algunas cosas que ahora, algunos días después, descubro que dicen más que lo explícito. Me dijo más o menos esto: ah, no sabía que estaba el tren, ¿ya se fue? (ver A). Tienen que venir a esta escuela. Tienen que darle a los chicos esas charlas de alimentación. Acá, por ejemplo, la gente tiene vacas y nos las ordeñan, prefieren comprar la leche (ver B). Y tienen que venir a hablar del cepillado de dientes (ver B y C). Los chicos comen muchas golosinas y tienen todos los dientes picados.

Este texto con pocas pretenciones se complejiza. Tiro del ovillo y voy descubriendo cosas, pliegues de una realidad que todavía se simplifica con el clásico “los chicos del norte se mueren de hambre”. Intento unir los elementos, reflexionar sobre lo observado. Es nada más que eso.

Volvamos.

La conversación con la maestra rural de Los Perez me resulta muy rica, principalmente por lo que subyace a sus dichos:

A- Cuando ocurrió la conversación, el tren hospital ya se había ido de Monteagudo. Estuvo estacionado allí, en actividad, durante 4 días. Atendió a más de 200 chicos. Ella, maestra, no lo sabía. ¿Es posible que un acontecimiento de esa naturaleza, que se repite una vez al año, no lo supiera? ¿Nadie fue capaz de decirle a esa maestra, que, vale aclarar, tiene compañeras maestras y le da clases a unos 90 chicos, de que el tren estaba a unos 10 kilómetros de su escuela? Por si no se dieron cuenta, estoy hablando de una cuestión de comunicación. Tanto estamos hablamos de ella, de un lado y del otro, y me vengo a topar con el ejemplo perfecto de desinformación, donde la existencia de monopolios y alharacas tienen su correlato fatal en la realidad.

Agrego nomás un último detalle, ilustrativo al palo: en pocos meses Monteagudo contará con su propia radio comunitaria. Asistí a una charla de la que participaron unas 20 personas, entre vecinos de Monteagudo y localidades aledañas para la formación de técnicos, locutores y productores de contenidos. El gobierno ya dispuso de los equipos y los pueblos ya cuentan con los espacios para instalar las radios. Les falta poco para estar al aire. ¿que a los pobres no les importa la comunicación?

B- Mi querida maestra me sigue dando material de reflexión (hablaré otro día de la directora, merece post aparte). Resulta que la maestra me dice que “tienen que venir a dar las charlas. Están las vacas y no las ordeñan” Ella lo sabe. Ella es maestra. Cumple un rol fundamental en un pueblo como Los Perez, donde el único vestigio de Estado que hay en 10 km a la redonda es ella, su escuela y los postes de luz. Ella tiene el privilegio y la responsabilidad de representar al estado frente a las familias de su distrito, y, por sobre todo, sabe a la perfección que las vacas están, falta que alguien las ordeñe. Y entonces, ¿por qué espera que alguien de Buenos Aires, que llega una vez al año con guantes de latex y jarabes para la tos le diga a los vecinos que apenas conoce lo que ya la maestra sabe? ¿Cuál es la razón para que ella me lo diga a mi pero no se lo diga a los padres de sus alumnos? Con una claridad que yo no tengo, uno de los pediatras del tren, tucumano él, días antes de que ocurriera mi conversación en la escuela, me lo dijo: están acostumbrados a que les den todo. Siempre fue así. Es increíble que en tanto tiempo que la fundación llega a estos pueblos, no haya dejado nada para que ellos se organicen y generen sus propias herramientas.

Se que en este punto me estoy metiendo en un terreno sensible que conozco poco. Solo voy a agregar que hay una responsabilidad compartida entre pobladores y gobiernos para que situaciones como estas, tan de sentido común, se perpetúen en el tiempo. Tengo el testimonio de otras dos personas, peronistas K de estos pueblos tucumanos, que me llevan a afirmar lo de la responsabilidad compartida. Los mismos vecinos del pueblo muestran un profundo desinterés en el progreso, en cualquier atisbo de cambio. Así, hasta al más voluntarioso se le hace difícil.

C- Es una realidad tan o más incontrastables como los puntos anteriores. Los chicos del interior tienen mal las dentaduras. Se trata, ante todo, de un problema de educación. No hay una cultura del cepillado de dientes. Y para colmo, no hay dentistas. Y los que hay, hay que pagarlos. Y son caros.
Tengo cero autoridad para hablar de cuidado bucal, solo me atreveré a decir que muy pocos tienen la mínima costumbre de cepillarse, y la solución buscada es la de sacarse los dientes que molestan como quién se quita el problema de encima. Que no es estrictamente un cuestionamiento negativo el que les estoy haciendo, ya que, nuevamente, partimos de una mirada diferente para evaluar lo bueno y lo malo de algo en sociedades tan diferentes a las nuestras.


El texto se hace largo. Hay muchas explicaciones para dar, y los temas están todos unidos, como en un ovillo. Son temas que tienen elementos de la economía, de la educación, de la salud, de una comunicación que exprese esos objetivos, de militancia y de tiempo. Hacen a la democracia.

La importancia que nuestra presidenta le da a casi todos estos objetivos está bien fundamentada. Son sólidas nuestras razones para creer que demostraron capacidad para cumplirlas. Las obligaciones con la educación formal en el norte, donde los chicos se morían de hambre, en ocho años han progresado mucho. Por mencionar algo: los maestros van a las escuelas en sus propios autos, lindos autos nuevos.

Más o menos lo mismo pasa con los servicios de salud, aunque ambos tópicos muestran déficits, como dije antes. Nadie se muere de hambre, porque pueden comprar la leche aunque tengan las vacas.

Queda mucho por hacer, y eso es algo que está claro en la presidenta. Lo repite constantemente. Con sus discursos nos interpela y nos llama a la acción. Tenemos muchos elementos en nuestras manos, empezando por la política, para trabajar con un norte común.

Basta de reclamar soluciones inmediatas desde el living de casa, en la creencia de que no se hace nada por el pueblo. ¿Saben lo que significa que un vecino del pueblo de Palomino te diga que está criando gallinas ponedoras que le dió el INTA? ¿O ver en el medio del monte tucumano diez casitas y una escuela, y una camioneta del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación?

Estamos nosotros, los militantes y las clases medias para recordarle a esta presidenta, y a los que puedan venir, qué cosas quedan por hacer. No desde la abulia o la soberbia, sino desde la buena leche, desde las ganas de progresar.


Cada vez que le dejamos la presidencia, democrática o no, a las elites militares y oligárquicas, tuvimos chicos muertos de hambre en el norte y en el conurbano. Hubo represión de la protesta en el pasado, hoy no.

A partir de ahí, hay que reconstruir un país entero. Y eso, necesariamente, requiere de los medios de comunicación que Clarín posee.

Y también se necesita renta.

¿Acaso no estuvimos hablando de todo esto ultimamente?




Por último: son demasiado buena gente.









Fotos con Copyright de Mariano Iñiguez
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22 comentarios:

Marie dijo...

un tema complicado, sí
mi viejo trabaja en aps con una ong en una escuela de la provincia, no muy lejos de buenos aires, unos 60 km, y muchas cosas de las que contás también se dan
ejemplo: los baños de la escuela tenían las piletas muy altas, los pibes más chiquitos se tenían que subir a una silla (!) para lavarse las manos. Resultado: o no se las lavaban, que es un cuidado básico insoslayable de la salud, o se subían a una silla en medio del agua y 50 nenes más, peligroso.
Hasta que no fue la ONG a proponer hacer los baños un poco más accesibles, a la directora ni se le cruzó x la cabeza que se podía hacer algo con eso. Capaz porque hay mucha burocracia para conseguir que te arreglen algo, capaz la costumbre, la inercia, no sé

Las fotos buenísimas, Mariano

Lupe dijo...

Genial... Nececitaba leer esto para entender algunas cosas, gracias!

Lupe

Lupe dijo...

Genial... Nececitaba leer esto para entender algunas cosas, gracias!

Lupe

Ricardo dijo...

Excelente relato.
Yo vivo en Tucumán, capital, pero conozco la realidad de la provincia (y algo la de Jujuy). Puedo dar fé que tu testimonio es ajustadísimo.

No se vive acá lo que se vivió durante 2001/2002. Yo hacía guardia por esos años y es verdad que faltaban hasta vendas. Teníamos que usar una sola jeringa por día y por paciente. Absolutamente terrible, desolador y desalentador.

El comentario del chico ese en el blog del Corvino es sólo un lugar común que se repite como mantra. Lamentablemente.

¡Saludos y te sigo!

Ricardo dijo...

PD: si hay algo que sobre en estos lugares es dignidad.

Anónimo dijo...

Nunca dejé comentarios en un blog, y decir verdad (muy) pocas veces he leído alguno. Cuántos temas de fondo que podrían ser desarrollados a partir de lo que leí aquí, y me pregunto sobre uno en particular, no más ni menos importante que los otros: información y vías de comunicación (prefiero evitar decir aquí medios de comunicación para evitar tal vez acotar el sentido amplio de las vías de comunicación). No podría arriesgar una reflexión acabada acerca de este paradigma (tal su magnitud, no es cierto?) pues ni siquiera cuento con los elementos necesarios para ello, pero esto no me impide preguntarme. Lo único que puede impedir preguntarme no es la falta de herramientas, sólo la falta de voluntad.
Desconozco lo que las mentes más lúcidas de nuestro tiempo tienen para decir acerca de las vías de comunicación que se establecieron en nuestro mundo, sería interesante conocer un poco de esto. En lo particular me interesa desde un lugar emancipador. La emancipación que resultaría de cómo intervenir más activamente en la construcción de nuestra realidad.
Hoy llegó hasta mis oídos una voz, singular y viva, relatando experiencia. Me llega independientemente de los motivos y/o intenciones de esa voz y reaccioné con unas cuantas preguntas que hacen a la construcción de mi realidad. Y qué pasó allí? De qué se trató ese contacto? Cómo esa voz y lo que ella tenía para contarme me fue perfectamente permeable? Una voz singular, un oído singular, preguntas que afloran. Dos hojas en la tormenta se rozan. No puedo dejar de sentir que el roce será caricia en tanto la voz y el oído así lo quieran, en tanto para eso estén dispuestos. El soporte para que ello suceda parece existir. Y parece que el encuentro dependerá sólo de marcadas voluntades. Podemos decirnos cosas, podemos escucharnos, y podemos preguntarnos: interesantes tiempos parecen éstos.
Me voy ahora un rato con mis preguntas porque me gusta jugar a acomodarlas un poco, a ver qué otras preguntas puedo hacer, a ver cómo se articulan, cómo en definitiva parecen indicarme la figuración de mi mundo, el camino hacia la realidad que más me gusta.

S.

Anónimo dijo...

hola soy el famosos nico!.

soy pampeano, lindo el relato. nunca llegue a tucuman. pero si estuve en chaco, formosa y corrientes.
estuve en el norte de cordoba y catamarca. me falta es verdad tucuman santiango salta y jujuy.

bueno soy pampeano. la realidad q yo vivi se puede decir q es privilegiada en este pais. nunca me falto nada. y lo que vi este verano en cba ycatamarca yo pense q no existia mas. es lamentable las condciones en q vive la gente. y no hablo de las urbes, sino de los pueblos.
anda a los pueblos aborigenes del impenetrable, de formosa etc. y vamos a ver si la gente no vive de forma lamentable.
es increible y esto lo q resalte en el post del corvino, de q la presidencia en 8 años nunca le vi dar prioridad a estos temas.
hablas de renta... y año a año vemos felices a la presidenta hablar de las reservas en el banco, del superavit q tenemos.
peor aun viendo como esta gente y sus amigotes duplican todos los años sus patrimonios.

si queres yo bajo el copete con el NOA, pero tampoco quieras vender espejitos de colores.

saludos Nico

MarianoMundo dijo...

Hola a todos y gracias por comentar.
Bienvenido Nico. Hacé lo que quieras con el NOA. Tal vez hagan falta algunos años para que entiendas lo que escribí.

Saludos

Martín Zariello dijo...

Muy buena la crónica. Más el acompañamiento de las fotografías termina conformando un testimonio muy revelador al que yo, desde Mar del Plata, probablemente no hubiese podido llegar de ninguna forma. Un abrazo.

Anónimo dijo...

Otra cosa porque no contas como las megaempresas mineras corrieron un pueblo completo en el norte?y como destruyeron y siguen destruyendo todo el norte? vos cuantos años tenes pibe? donde estabas en los 90? donde estaban los que hoy gobiernan? vayanse a cagar progresistas de mierda.

Horacio dijo...

simoca me hace acordar a la moca coca, de "los mercaderes del espacio"

o de "la guerra de los mercaderes", ahora me agarró la duda :(

MarianoMundo dijo...

Me llegó este comentario a la casilla de mail, pero por alguna razón no se publicó en el blog. Tengo el honor de copiar y pegar y publicarlo yo (es un anónimo):

Anónimo ha dejado un nuevo comentario en su entrada "Se escriben muchas ganzadas en los blogs":

Tenes razón se escriben muchas ganzadas en los blogs, esta que escribiste vos es una, anda a vivir al norte, yo soy docente rural y trabaje en estos años en la mayor parte de los pueblos de Jujuy y Salta, incluso para el Promse/Promedu, ahora leo tu relato y veo como construye en base a sofismas toda su propaganda proselitista el gobierno con el apoyo claro del farsante de Diego Wirtz, de la rata de Victor Hugo y de tantos otros que "se convirtieron", dejense de rompero los huevos que la oposición sean los impresentables de Macri y Carrio no les da derecho a nada, en los 90 tampoco se mostraba la pobreza, el sistema es mucho mas que "los monopolios" y su versión de la realidad, o la cara de Klijtina, esa perversidad es un juego en el que todos estan metidos y los hijos de puta que veraneaban en Miami ahora se hacen los sentimentales porque vieron llorar una nena en cadena nacional?, son unos pequebus de mierda resentidos,yo sigo viendo esos niños todos los días todo se sigue llendo a la mierda y algunos se hacen los otarios porque este gobierno los representa en su manera de sentirse "de izquierda" sentados comodamente en el living de casa,como diría Silvio "que fácil es protestar por la bomba que cayó a 1000 km de la heladera". Esa visión parcial del que "visita" la pobreza y se sienta a relatarla a los amigos como si fuese un safari ya la vi antes, la pobreza hay que vivirla pero en serio,y si no hay que irse a cagar.
Adeus.

Anónimo, dejame llamarte Adeus:
¡por fin alguien se mete con el título del posteo y lo lleva a su máxima expresión!
Dudo mucho que seas un maestro rural,Adeus, por ciertas marcas que dejás en el texto que me hacen desconfiar. De todas maneras, voy a concederte eso. Sí, espero, que no estés ejerciendo. El solo hecho de leer tu palabras llenas de resentimiento, lugares comunes y simplificaciones me hacen pensar que no serías un buen docente, mucho menos para gente que hace de la dignidad y la humildad un modo de vida.
Tenés razón cuando decís que algunos se sientan a mirar la pobreza por la ventana. Pero es una idiotez que intentes hacernos creer que la pobreza hay que vivirla para poder hablar de ella. Dos cosas: no estás bien informado y no sabés cual es la historia de mi vida, de donde vengo y que me trajo acá, como para que puedas formular una acusación semejante. Segundo: ¿me estás hablando de "vivir la pobreza" a través de un blog? ¿Me estás diciendo que vos sí sos pobre, pero con computadora y conexión a internet?
Por último: linda la cita de Silvio. Volvé a leer mi texto. Si acaso encontrás alguna protesta contra la pobreza en ella, volvé a escribirme. Creo que le pifiaste feo.

MarianoMundo dijo...

Hola Horacio.
Simoca tiene una histórica gran feria de mercaderes. Es verdad, todos los sábados!

Anónimo dijo...

Primero:Dormi 5 años en un cajón de manzana.
Segundo: ¿vos sos un buen docente?
Tercero: El que habla de la pobreza en un Blog sos vos, yo solo comento.
Te tiro 10 nombres y decime si conoces su realidad actual, Barro Negro, Susques, Fraile Pintado, Abra Pampa, Tres Cruces, Olacapato, Catua, El Talar, La mendieta, Lipán,seguro no los viste ni en el mapa pero te crees con derecho de contestar solo porque te tomaste unos días de vacaciones entre los pobres. Vi un perro blanco, vi dos perros blancos,todos los perros son blancos, buen sistema para calcular, tengo malas noticias, hay un ejercito de perros negros que usted los ignore es otra historia, ojo todos los perros pueden morder en eso si puede usar su metodología señor.

Anónimo dijo...

Que le pasa ¿todos lo que no piensan como usted(incluido Nico)dicen gansadas?

MarianoMundo dijo...

Hola Anónimo. Esto viene para largo, parece. Tiene Ud. una verba encendida, dice muchas cosas, difícil contestarle.
Todos decimos ganzadas, incluído yo. Por eso el título del posteo está en mi blog. Una ironía, podría decirse.
Abra Pampa y Tres Cruces los conozco bastante. También Cangrejillos, que queda por la zona. San Isidro, en Salta, podría integrar su lista.
No soy docente, creo que está claro. Conocí muchos, y juro que ninguno habla como usted.
Me refiero a la pobreza, con poco derecho, en mi blog. Y aclaré, y al parecer quedó claro para unos cuantos, que no hice un estudio científico o un tratado de la pobreza. Se trata, simplemente, de observaciones a las cuales les agregué mis reflexiones. Si sirven para entender un poco algo, bárbaro; para pensar alguito, genial, para saber que no todo está hecho y que se necesita más esfuerzo, mejor todavía.
Dudo que una actitud como la tuya sirva para mejorar nada.

caca dijo...

Explotó el blog, buen texto y mejor repercusión. Me encantó. Pero más me gustaron las fotos! Quiero ver más.

Abrazo

MarianoMundo dijo...

Hola Emo, gracias por comentar.
Este fue un caso puntual, manijeado bastante.

Realmente me gustaría tener un buen debate acerca de realidades distintas a las nuestras, tratando de dejar de lado, todo lo posible, algunos prejuicios.
Tiré algunas puntas, algunas cosas que estuve reflexionando a partir de este acercamiento, que pueden ser más o menos correctas. Es cierto que uno lo mira desde afuera, pero creo que lo hago con el espíritu de dar a conocer una realidad que permanece oculta para casi todos. Considero que puede ser útil para pensar que pretendemos hacer con nuestras capacidades.
Me jode un poco que nadie se metió con el tema concreto. Será que no es tan fácil hablar de pobreza.

Saludos

Anónimo dijo...

Excelente post!!! sé, Mariano, que lo que haces es con sumo respeto, sé que tus comentarios estan apuntados a tratar el tema con decencia, ser pobre no es una elección, aunque muchas veces escuchamos decir lo contrario, también sé, que este flagelo no es problema de uno solo, todos contribuímos a que esto pase, todos miramos para otro lado y todos tiramos pálidas, pero... a la hora de arremangarse... nos hacemos los boludos y que venga el responsable y se haga cargo.
Anónimo Adeus, yo te veo más para oficinista que para docente rural, imaginate, los pibitos te ven llegar con esa energía y se quieren suicidar en masa, dejate de joder y renuncia o sino ponete a laburar en serio y no mientas, porque a los cinco años no entras en un cajón de manzanas ya estas para dormir en el suelo.La verdad, Adeus, me jode decirte esto, pero la vida es acción y reacción, no me queda más remedio, despertás mi ira. No entendí lo de los perros, sobre todo, eso de que todos los perros muerden, es decir quiero no entender lo que quisiste decir, bueno no haces más que repetir lo único que sabes hacer (agresión). Mariano muy buenas fotos y buen texto.ADB.

MarianoMundo dijo...

ADB, muy buena su respuesta.
La volví a leer.

Laura dijo...

Hce unos meses estuve en un pueblito de montaña, en la zona de La Yunga, en Jujuy.
Fui por trabajo (soy técnica de un programa social de Nación). Esta vez no iba con una función específica, sino más bien para acompañar y apoyar en caso de ser necesario.
Me apsaron varias cosas, era el primer pueblo al que iba con una cultura taaaaaan distinta, y me llevó un tiempo descubrirlo y pensar en sus consecuencias. Los primeros pensamientos fueron en los potenciales turísticos y las posibilidades de desarrollo. Y fueron pasando las horas, y fui viendo la dinámica del pueblo, el vivir de la gente a la que YO le asignaba necesidades desde mi marco teórico y desde mi porteñez. Y llegó el enojo conmigo misma, por no entender desde un principio que estaba en un lugar con otro paradigma de vida. Las necesidades básicas estaban cubiertas, los sevicios también, a excepción de la comunicación, que por geografía y distancia se hace muy compleja su resolución.
Bueno, no estoy en condiciones de hacer un diagnóstico, pero sí de expresar el gran aprendizaje que significó para mí esa experiencias. De entender con cuántas ideas preconcebidas yo llegaba, cuántos conceptos teóricos al pedo ("desarrollo de potencialidades", ¿de qué sirve cuando no se es capaz de "ver" realmente al otro y entenderlo?).
Perdón por lo desordenado de mi comentario, espero se entienda lo que quería decir.
Saludos!

Anónimo dijo...

Por que no:)