Sigo con la reedición y republicación de fotos del viaje (no puedo creer que hace solo 2 meses y pico que volví. Todo está más o menos igual que entonces).
Las fiestas patronales son una costumbre muy arraigada en los pueblos del interior. Todo se hace más o menos igual, año tras año, y no decaen en participación e importancia para aquellos que las han vivido muchas veces, justamente porque habitan en esos pueblos.
Se participa de muchas maneras, cada uno hace su aporte: en la preparación de la plaza, en la música que acompañará a la virgen en su recorrida por las calles del pueblo, en la fabricación de imagenes con flores (hermitas), etc.
Una noche y un día dura la fiesta, y es tradicional que las distintas comparsas de Maimará se enfrenten musicalmente en alguna esquina, demostrando así la devoción por la Virgen. Fuegos artificiales frente a la iglesia y un recital nocurno en la plaza serán también parte de los festejos, junto a ofrendas de vegetales que luego de bendecidos serán repartidos entre los más intrépidos.
La Virgen de la Candelaria en su día de fiesta.
1 comentario:
Hermosas las fotos. Aunque creo que, dada la ocasión, hubiera quedado muy bien sacar algunas a color. Si tenés podrías subirlas, por favor?
Saludos
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