E´sasí: comienza diciembre y ya me hincha las pelotas el año que se acaba. Quiero que todo se termine rápido y arrancar lo nuevo de una.
Pero también me pasa que empiezo a reveer las fotos que hice durante el año. Y entonces las reediciones, los anuarios, esas forradas.
Lo bueno que encontré esta vez es la certeza (salvo que alguien diga lo contrario) de que estoy consolidando una estética propia. Desprolija, un poco sucia, apurada, dinámica, bien expresiva. Hay toda una posición tomada en cuanto a mi fotografía. Algo que la aleja de cierto ideal. No es novedosa, pero banca la parada y asume con dignidad, pero sin falsa modestia, que recorrió su camino de maduración y que está grandecita como para salir a la ruta.
Es una fotografía que se involucra, que resiste con un lenguaje ancestral pero no por eso menos válido. Transmite ruido y tensión. A veces espera, otras encara y guapea (?).
Esta selección, que acaba de ganarse el título de "Los nenes bien", consiste en una serie de entregas de mi indomable e inconcluso trabajo ensayístico acerca de la nueva militancia del peronismo juvenil. La Cámpora de San Telmo, más precisamente.
Una mínima parte de este ensayo fue publicado en el número 3 de la revista cooperativa Indómita Luz. Pueden acceder a ella por acá. También hubo una pequeña participación en el libro Kirchnerismo para armar, y en el titulado La plaza en ojotas, por los cuales también estoy muy agradecido.
La idea de colgar el trabajo en este blog tiene un doble propósito. El primero, un poco lo que estuve hablando acerca de lo estético y expresivo. Veremos si las fotos sostienen lo que dije. El segundo, es el de presentarles un año de mucho laburo político, donde pasó de todo, y esto es solo un (aparente) resumen.
Mi edición personal, personalísima, comienza ahora:
Los nenes bien - parte 1





















Ah! Felicidades, y mucha fuerza para el 2012!!.